PERFILES; Natalia Giraldo Giraldo

Yo soy la chica de la sal, 
 Donde voy , llego con toda la buena energía, con toda la buena suerte, yo soy la chica de la sal, porque con la sal he llegado lejos... hasta mi ser interior.


Nos introducimos en el bosque  por el sendero del Arroyuelo, yo camino detrás de ella tratando de no meter mis pies en ningún charco,  el lugar parece el escenario perfecto para un cuento de hadas; cruzando el Arroyuelo, en un claro del bosque, está la casa -taller de Natalia Giraldo, básicamente es más taller que casa, es más verde que cemento, mezcla de sal y viento.
Ella con una cálida sonrisa empieza a narrar su historia. 
Hola soy Natalia Giraldo Giraldo, soy artista plástica, egresada de la universidad Nacional.
Mi obra reflexiona en torno a la mujer, las violencias de género enraizadas en las historias de  familia, de barrio, de ciudad, de patria, de la sociedad., Partiendo de ahí,  hago toda una reflexión con el llanto, con el vientre, con los paradigmas religiosos. Es hablar de lo cotidiano, de lo simple de lo que les ocurre a muchas mujeres. 

Soy la mayor de tres hijas. De niña fui muy inquieta, odiaba las barbies, me gustaba patinar, montar la bicicleta, siento que desde muy niña estaba revelándome contra los estereotipos establecidos para la mujer.

Vivíamos en Ituango, un pueblo de Antioquía, mi amor por el campo, nací allí.  Cumplí 7 años y nos vinimos a vivir a un barrio de la ciudad de  Medellín. Allí corrieron años maravillosos, la alegría de las fiestas navideñas, las luces, era saltar y jugar en las calles, ser felices. En tanto que mi mamá iba construyendo vida, trabajando por y para nosotras.


Mi mamá para mi es una mujer de poderes, para mi es la reina, porque pese a todas sus vicisitudes ella me apoyo en lo que quería estudiar, siempre  presente en mi vida su amor.

                       "Lo  bonito del arte es que nos envuelve a toda la humanidad."
El sol se filtra por los entresijos de la ventana y Natalia me invita a conocer su taller, mientras continúa emocionada narrando su historia, la de la sal, de las rutas de la sal, de cómo llegó a sentirse tan identificada hasta la pasión por dicho elemento.

Es un proyecto que llevo trabajando hace 8 años.
La sal para mí, encierra  todo, es un elemento natural tan fuerte que toda la historia de la humanidad gira entorno a ella, así no lo creamos.  Puede ser tanto positiva como negativa y, eso es lo que me gusta de este material, su ambigüedad, que realmente una es quien lo direcciona. 
!Y Bueno, desde ahí me parece  algo encantador!


El primer encuentro con el material.
Hay un mito de la biblia que es el de la mujer de Lot,narra que: Dios iba a destruir la ciudad de Sodoma, pero entonces él quería salvar solamente una familia que era la familia de Lot, manda para tal evento  al arcángel  Gabriel a decirles  que  que ellos iban a ser salvados, pero que  nadie puede mirar hacia atrás.

Entonces ese nadie puede mirar atrás  me cuestiono a mí mucho;  ¿Quiénes no pueden mirar atrás ? ¿Quién miró atrás? ¿Quién comió la manzana?  Una mujer…Una mujer. 

Ese estigma  no solamente se narra en la biblia; si te vas a muchas mitologías universales,  ves  como siempre la mujer tiene la relación con lo negativo, y con lo positivo también porque manejan la misma dualidad de la sal. Hay una cuestión histórica, mitológica. La historia  nos direccionan a conveniencia. Era conveniente que nosotras estuviéramos solamente para los hijos, y, nosotras obviamente, somos mucho más que ovarios.

Recuerdo que  fueron doce horas de quema haciéndola a escala natural,  en ese mismo momento y a la par  hice la diosa  pequeña. 
Ella, nace como una idea a partir de ese mito de las lágrimas

La primera vez que la hice, usé como molde,  las botellas  de agua bendita que viene en forma de Virgen, a esta obra la llamé “exilio”. Fue  el momento  en que la desterritorializo de su cielo,  la bajo a este mundo terrenal y, empiezo a viajar con ella.

Fueron muchos días de trabajo y ensayos, hasta que logré hacerla a escala natural.  Con ella estuve en el MDE 15, en el museo de Antioquia.  allí sentí que me gradué con la escultura, con lo técnico.
Para mí, lo magno y lo  más brutal a lo que podía llegar era poder ver a la diosa de la sal,  a la cara.
Verla de frente toda ella  de sal maciza y poder poner en espacio público y que lloviera, se me volvió  una obsesión.
Recuerdo que  fueron doce horas de quema haciéndola a escala natural,  en ese mismo momento y a la par hice la diosa  pequeña.
                            
             El trabajo con las mujeres, Con pecado concebida.

Tengo una obra en comunidad que se llama, “con pecado concebida”
La enseñanza de vida más grande, es que la diosa de la sal, más pequeña, la de 11 centímetros, es la más fuerte, la más contundente.
 Un dia, me surge la idea : Y qué tal si yo invito a un grupo de mujeres, preparamos alimentos, y  la consigna es:no se puede cocinar con sal, después en medio de la cena, yo les regalo la virgen de sal.
Fue como si la vida y mi proceso artístico unidos me dijeran : No es lo más grande, es lo más pequeño con una intención grande lo que importa.
La intención de reunirnos, la intención de ser las mujeres hablando.Es ahcer  que la obra  no se vaya a un objeto sino a unas relaciones, a un diálogo, eso es lo realmente fuerte.

En la sal yo puedo encerrarnos a todas las mujeres, a la sierva y la Diosa



Esta obra emprende un viaje hermoso; primero la hice con la red de las mujeres artistas REMART, luego con la red de mujeres LITERA, con el Circulo de Mujeres chí, la hice en la ciudad de  Bello- Antioquia, con el grupo de mujeres Confluencias; apoyada por el banco de la República estuve haciéndolo con mujeres Wayuu y con mujeres  Guajiras, siempre con diferentes alimentos autóctonos.
Más tarde  viajé con ella a República Dominicana.


Lo más bonito es que cuando  las mujeres tiene la relación con la comida, que esta simple, y aparece la sal en la mesa en forma de mujer, de diosa, a partir de ese momento se generan unos diálogos que superan las barreras de la  religión.

Esta una obra que siento que se tiene que hacer en todas partes, es mi consentida.

Allí en " Con pecado concebida"  puede trascender lo técnico y darme cuenta que era un asunto de solidaridad con la otra.

Empiezo a entender que yo soy la ruta de la sal.


"Sane las lágrimas, sane la tierra, sane el femenino  que me habita,que habita la humanidad. "
Y luego.... 
Hace algunos años conocí al padre de la permacultura, Masanobu Fukuoka, agricultor japonés (Quien ya murió), él se inventó una técnica maravillosa que se llama” las bolas de vida”, son simplemente arcilla con sustrato y semillas, se hacen las bolitas y se lanzan a los terrenos que se vana cultivar , la idea es entender la naturaleza y como trabajas tu desde ese entendimiento.

"La relación con la naturaleza es entender la naturaleza.."

Y llega la  idea de los pies, eso pies  que antes había hecho en sal, ahora serán barro con semillas.

La propuesta es tener el mismo principio de Fukuoka, donde yo voy a donar los pies, como una ofrenda a ciertas personas, ellas los van a regar, a cuidar. Aquí entran un montón de conceptos hermosos: primero es poner los pies sobre la tierra, segundo las plantas de los pies, tercero cuando te regalan un pedacito de una planta te dicen: te regalo "un piecito", siembra el piecito, plantar los pies, eso no lo sabía cuándo hice los pies de sal, solo sabía que quería seguir adelante.

Ahora doy clases en Arcadia, un centro de educación especial donde tengo la fortuna de tener alumnos con diferentes condiciones de vida, de maneras de ver la vida y entenderla, seres mágicos, maravillosos que tiene múltiples enseñanzas para dar. Siento que con ellos más que maestra soy una alumna, es una retroalimentación. concluye Natalia.


seguir a Natalia en: http://giraldog.wixsite.com/nataliagiraldo


Fue un lunes en la tarde, la buseta que llevaba a Mazo iba un tanto despacio, un tanto adormecida, le pido al conductor: me deje en Chorro Clarín, por favor. 
"Llegamos a Chorro Clarín", anuncia el conductor, desciendo del vehículo y miro a todos lados un tanto desorientada, allí no hay ningún chorro, lo que sí es clarín es que el lugar esta solo absolutamente solo. Busco mi teléfono celular; camino de un lado a otro buscando señal. 

¿Alo? ;se escucha al otro lado de la línea. Dale, ya voy por ti -me informa mi entrevistada- ;me siento a esperarla. 
Varios motociclistas parquean sus motos ;y desaparecen caminado por la carretera.

El viento silba entre los árboles,aparece un perro negro saltando  y... aparece ella, la chica de la sal ,con sus negros cabellos al viento, me saluda, me indica el camino y me dice: sígueme...


Este es el resultado de mi palabreo con Natalia Giraldo Giraldo, en su casa ubicada vía el Sendero del Arroyuelo.
Particularmente me llena el alma de infinitud de emociones, me llena de partículas de sal el corazón.

Con amor: Elena L













                         







Entradas populares